Cuidado bucal para mi bebé
Muchas mamás incorporan el chupete a la vida temprana de sus hijos por un sin fin de motivos y es válido.
Pero de seguro también han tenido que pasar por el agotador episodio de eliminar el chupete de la vida de él tarea no fácil y proceso tedioso que puede hacer desertar a las madres llegando a prolongan este hábito por años.
El uso prolongado del chupete y sus daños irreversibles.
The American Academy of Pediatrics recomienda el uso del chupete para las siestas diurnas y nocturnas una vez que el amamantamiento está establecido, antes de eso podría perjudicar la lactancia llegando a boicotearla totalmente, pero volvamos al tema.
El chupete tampoco es algo terrible de hecho su uso durante el sueño se asocia con una menor incidencia del Síndrome de Muerte Súbita.
La mayoría de los niños interrumpen su hábito de usar chupete entre las edades de 2 y 4 años, el problema es cuando NO lo hacen. El chupete produce un desequilibrio en la formación de los arcos dentales, es decir, de los huesos en donde van sujetos los dientes. Provocando mordidas abiertas, maxilares angostos, en fin… muy malas mordidas que incluso pueden afectar la estética facial.
Si lo sacamos a tiempo, la naturaleza es sabia y muchas veces el hueso y los dientes vuelven a su desarrollo normal. Pero otras veces NO, y se necesita de la ayuda de aparatos especiales para re-direccionar el crecimiento.
Fuente: buenasmamas
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